Transferencia tecnológica, nuevo juego y nuevas reglas

Gaia Investigación y Consultoría tiene una tradición de trabajo con agentes tecnológicos y especificamente con centros tecnológicos desde su nacimiento.  Por ejemplo, la corporación TECNALIA, AZTI-TECNALIA, GAIKER, etc, han sido y son clientes y partners en diferentes proyectos. Por esa razón nos parece oportuno hacer una pequeña reflexión en voz alta, -ahora que parece que empezamos a salir de la crisis, o de los efectos más perversos de la misma-, sobre las debilidades y amenazas que ha dejado esta ríada económica. Escombros y destrozos sobre los que deberemos operar para volver a obtener resultados óptimos.

Los centros tecnológicos, con variaciones en el sistema y en los porcentajes, plantean un modelo, vamos a llamarlo modelo FUNDACIÓN, en el que el 50% de su actividad, -o una parte de relevante de su actividad-, se tiene que orientar a la adquisición y desarrollo de conocimiento. El otro 50% se centra en la transferencia de ese conocimiento a la industria de referencia. La adquisición de conocimiento se realiza a través de financiación pública, mientras que la transferencia se realiza mediante contratos, acuerdos, etc, con empresas. De esta manera, las administraciones se aseguran-ban dos objetivos:

1. esquivaban la posibilidad de que la necesidad de los centros tecnológicos para generar negocio terminase por provocar que perdiesen el pulso investigador e innovador, y 2. por otro, creaban las condiciones para que las empresas del país, su industria, se beneficiara de esta generación de conocimiento aumentando su competitividad y sus posibilidades de éxito (empleo y riqueza).

Este modelo plantea múltiples diferencias y singularidades, desde las que se derivan de la vinculación de un centro con un sector industrial y/o una empresa, p.e. IDEKO con ORONA, o las que se establecen por pertenecer a IK4 o a TECNALIA, dos modelos bastante diferentes. O incluso cuestiones singulares como la financiación FIK de Tecnalia Salud, entre otras.

Sin embargo, todos ellos, con mayor o menor grado de intensidad en cada uno de los elementos  se encuentran con el siguiente escenario externo provocado por la crisis económica:

A.- Las ayudas del sector público sobre las que se producía una parte sustancial de la transferencia tecnológica (Europa, estado, autonómicas, forales) han disminuido de forma notable.

B.- El público objetivo al que dirigirse, las empresas de carácter industrial, es más pequeño, bien por la desaparición de empresas, o por encontrarse en situación de dificultad (ERE, etc).

C.- Las necesidades de innovación o de desarrollo tecnológico del público objetivo se han reducido. La escasez de recursos ha hecho que las apuestas se hagan sobre proyectos concretos (pocos) en los que se vuelcan los recursos de las organizaciones. Es un cambio de estrategia en la línea de trabajo, menos proyectos, pero incremento en la intensidad de la apuesta. De un modelo extensivo a uno intensivo.

D.- Se produce un % importante de relevo en las personas de contacto.

A nivel interno, en las organizaciones, aparecen con diferente fuerza la siguiente situación:

La reducción de recursos disponibles de fácil acceso en el mercado público y privado ha generado en los centros una política hacía dentro, intraempresa, tendente a la autarquía, y hacía fuera, hacía el cliente, extraempresa, de focalizar el esfuerzo en la venta. Tendencias no necesariamente negativas pero que una aplicación extrema en muchos casos y una ausencia de flexibilidad con el contexto señalado arriba provoca:

1.  Que se proceda a una hiper-explotación de los clientes existentes
2. Que se produzcan situaciones de utilización instrumental de pequeñas y medianas empresas como medio para conseguir acceder a recursos públicos pero sin ningún acompañamiento, servicio o funcionalidad real de transferencia tecnológica
3. El que se estén desarrollando acciones de consultoría como fuente adicional de captación de recursos compitiendo de forma desleal con estudios de ingeniería, arquitectura, consultoría aplicada, etc
4 Lo más grave de todo, que se haya olvidado la generación de futuros clientes de sus servicios. No se está generando cultura de innovación aplicada asociada a los centros tecnológicos. No hay cantera. Sólo se realizan acciones para empresas que ya compran, para que compren más.

El escenario de salida de la crisis se va a parecer poco, -se está pareciendo poco-, al de entrada. Por esa razón afrontar los problemas y diseñar nuevas soluciones para los nuevos actores y los nuevas escenarios que se han establecido entendemos que es prioritario.